ASOCIACION AMIGOS DE GUAPOY

ASOCIACION AMIGOS DE GUAPOY
La Aldea Guapoy, es una de las 116 aldeas mbya guaranies que existen hoy en la Provincia de Misiones, Argentina. Aguyjevete! es un Saludo Religioso Guaraní. Se levantan las manos hacia el cielo. Es un pedido de bienestar corporal y espiritual en Lengua Mbya Guaraní...

lunes, 6 de julio de 2009

UN POEMA Y UNA REFLEXION....

PRIMERO UN POEMA:
"Ayvu Pumbasy-DANZA DE LA PAZ-1994

Selva de sombra apacible,
Rios de regias cascadas,
Mares de olas danzantes
Y brisa que besa la paz,
Lapachos y cocos florecen,
Avecillas de trinos alegres,
Bestias de varias especies
Y humanos que viven felices.

Pero el dia cambio de repente
En largas noches de invierno,
Que dejo amarillo el tiempo
Y cubrio de virus la tierra.

Primavera libertaria
Cuando llegara tu voz
Mensajeria primigenia
De Luz radiante del alba.

Y soplara nuevamente
cuando el Condor Andino,
El Quetzal del Caribe
Y el tupin revelado,
Despejen de virus
A la madre Tierra,

Que lleno de ollin
Su identidad
Cuando suenen
Las Libres plegarias
Ritual solidario
DANZA DE LA PAZ

Danza de la Paz
Expresion del alma,
Del ser colectivo
De oracion sin fin,
Soplo de la selva
Kotyhu, Guahu
Y la poesia
de Dios ÑAMANDU.
ZENON BOGADO ROLON-TUPA KUARAHY PIAHU"
................................................................................
MATIAS LINDER, UN AMIGO QUE EN LOS PROXIMOS DIAS VISITARA MISIONES, HIZO ESTA REFLEXION:
Estoy preocupado y no se bien lo que he de hacer. Si que estoy haciendo alguna cosilla que otra, pero me he dado cuenta de que cada paso que doy, cada decisión que tomo y cada acción que realizo, están embebidos en una cultura, hábitos y comportamientos que contribuyen a perjudicar aquello que nos da vida, la pachamama.

El planeta tierra esta agonizando. No, esto no es una exageración.

Veamos brevemente algunos hechos generales:

Las relaciones entre los elementos básicos de la naturaleza terrestre – tierra, agua, aire y luz solar - están interconectados y son interdependientes. A su vez, las plantas, animales y microorganismos, que también están interconectados y son interdependientes, son vitales para la regulación del conjunto de ecosistemas (biosfera) y para mantener las condiciones que permiten la vida en la tierra. Pues resulta que tanto unos como otros se encuentran en estado critico, digamos que al borde del abismo.

La atmosfera:

No hay mucho mas que se pueda decir sobre el estado de la atmosfera. Contaminación del aire, lluvia acida, destrucción de la capa de ozono, concentraciones de CO2 que repercuten en el aumento de la temperatura global (aumento sobre cuyo limite no hay aun noción), etc.

Bosques:

De todos los bosques originarios del mundo quedan aproximadamente el 20%, de los cuales solo el 6% esta protegido. En Europa quedan el 2%, en Sudamérica el 8%....y estos porcentajes siguen disminuyendo.

Si seguimos con el nivel actual de de tala de bosques, en unos 25 años nos quedaremos sin bosques originarios (coincidiendo estimadamente con el hito histórico en que nos quedaremos prácticamente sin petróleo), lo que implica que todas las áreas forestales del mundo estarán bajo la gestión del ser humano. Algunos datos relacionados:
§ dependemos de los bosques para la generación de oxigeno y la captación del CO2; destruyendo los bosques, destruimos el sistema que debería ayudarnos a sostener la vida en la tierra;
§ con el nivel actual de reforestación (se estima que por cada 150 toneladas que se sacan, se reemplazan por 300 gramos), estamos perdiendo lo mas importante que es la biomasa (organismos biológicos vivos de un ecosistema), que es lo que genera y sostiene la vida de los bosques;
§ los bosques ayudan a ‘bombear’ el agua de lluvia hacia abajo, manteniendo el agua salada (por los minerales de las rocas) en las profundidades de la tierra. Al ser los bosques talados, el agua salada de la profundidad sube hacia la superficie, matando árboles y cultivos en la zona deforestada in también en extensiones alejadas de las mismas;
§ la mayor parte de los bosques se usa para hacer papel, periódicos y embalajes. Gran parte de los árboles que se talan en las zonas tropicales, árboles de mas de 60m de altura, se exportan a países industriales en astillas....
§ en lugares deforestados la precipitación puede reducirse entre un 10% y un 30%.

Suelos:

Los suelos se están degradando. Hemos perdido aproximadamente el 50% de los suelos por:
§ el crecimiento de las ciudades (el año pasado por primera vez la mayoría de la población mundial ha pasado a vivir en ciudades), las cuales ocupan las zonas con tierras mas fértiles;
§ la deforestación;
§ el uso excesivo de energía mecánica y química para la agricultura. Como cada vez menos tierra esta disponible (y la población crece desmedidamente…), se demanda cada vez mas de los suelos usando energía mecánica y química, reduciendo cada vez mas la fertilidad del suelo. Cuanta mas energía se utiliza, mas contaminamos la atmosfera ya que nuestra agricultura es petróleo dependiente;
§ el ritmo de creación de suelos, que se da gracias al agua y a las plantas, es de aproximadamente 8 toneladas por hectárea por año (en zonas húmedas, en zonas desérticas el ritmo es menor). El promedio actual de perdida de suelos es de unas 40 toneladas por hectárea por año.
§ El uso de fertilizantes químicos no solo reducen la fertilidad del suelo sino que también contaminan ríos, lagos y océanos (la agricultura es considerada como la actividad individual que mas destruye el medioambiente);
§ las calles, autopistas, rutas y demás carreteras (en el Reino Unido se estima que hay 1 milla de carreteras por cada milla cuadrada de superficie);
§ la tendencia a producir grandes cantidades de un solo cultivo, los monocultivos, contribuyen a la degradación del suelo, el incremento de las plagas, la degradación del ecosistema, incluyendo la destrucción del hábitat de animales e insectos que son indispensables para el mantenimiento sano de espacios naturales;
§ el incremento de la desertificación a nivel global.

Agua:

La cantidad y calidad de agua potable se esta reduciendo drásticamente:
§ los océanos están sobre contaminados, se esta sobre-pescando, las aguas se están sobrecalentando resultando en la desaparición de corales y aumento de huracanes, hay una masa de plástico flotando en el Océano Pacifico que tiene la dimensión de un país como México:
§ 20% de la población mundial no tiene acceso a agua potable;
§ 67% de la población debe buscar agua fuera de sus hogares;
§ el incremento de la población para mediados de siglo será cercano al 100%, mientras que el incremento de agua potable será del 0%;
§ el nivel de agua subterránea se esta reduciendo drásticamente;
§ Barcelona, por primera vez en la historia, tuvo que importar agua en el verano de 2008;
§ la lluvia acida, generada por los gases producidos al quemar combustibles, destruye bosques, suelos, ríos, lagos y lagunas, afectando la flora y la fauna que viven de los mismos (en Escandinavia hay miles de lagos ‘muertos’, o sea sin vida vegetal o animal, gracias a la lluvia acida).

En definitiva, tres cuartos de los servicios que provee la naturaleza a la humanidad están en declive.

Un tercio de la tierra tiene su naturaleza intacta, incluyendo Canadá, la Antártida y otras vastas áreas despobladas como Siberia, Groenlandia, etc. El resto de la superficie terrenal del planeta esta alterada por el hombre. A medida que aumenta la población y la tecnología, el porcentaje de naturaleza intacta disminuye estrepitosamente.

La pregunta que me hago es, ¿es el decadente 30 y pico % de naturaleza virgen suficiente para regular, mantener y sostener la vida en todo el planeta? ¿Será posible sostener la vida en la tierra con una población cada vez mayor y una naturaleza cada vez menos gestionada por su inherente sabiduría y cada vez mas controlada por el hombre? ¿Tenemos nosotros, la humanidad, los conocimientos y la sabiduría para manejar la tierra y sus recursos? Los datos de arriba, discutibles, argumentables, quizás algo imprecisos, pero definitivamente reflejantes de nuestra realidad, indican un futuro poco prometedor para nuestra especie.

Nuestra forma de pensar, nuestros valores, nuestra relación con ‘la vida’, nuestros hábitos y costumbres, nuestra cultura, nuestros trabajos, nuestras ambiciones, nuestras formas de vida, nuestras relaciones con la naturaleza, nuestras relaciones con los otros, nuestra ciencia y nuestra tecnología, nuestra educación, nuestras escuelas y universidades, todo esto ha sido un verdadero desarrollo. Nuestras casas son sólidas, calidas en invierno, frescas en verano, tenemos uno o mas autos para ir a donde queremos sin esfuerzo, nuestros trabajos ya no son tan duros (en términos físicos por lo menos), nuestras escuelas y universidades nos enseñan a prepararnos para tener una gran carrera profesional, nuestros hospitales y sistema medico nos permiten curarnos de enfermedades que antes diezmaban poblaciones enteras, tenemos hipermercados que nos permiten acceder a productos del mundo entero, tenemos un gran conocimiento y tecnología que nos permite hacer cada año cosas sorprendentes, nuevas, inesperadas. En fin, para un cuarto de la población mundial, unos 1.500 millones de personas, tenemos una vida relativamente plena, saludable, fácil y relativamente segura.

Y sin embargo, todo esto contribuye, directa o indirectamente, a la destrucción lenta y progresiva de la vida sobre la tierra.

Y sin embargo, hay pequeños sectores de la humanidad con sabidurías milenarias que ‘conocen’, que ‘saben’ como vivir en comunidad con nuestro planeta, dando y recibiendo de la naturaleza, equilibradamente, sin destrozarla. El problema es que no son la cultura predominante, ni pertenecen a la elite mundial, ni establecen el rumbo global, ni están formalmente representados en Naciones Unidas, ni en el G7, ni en ningún lado. Y no me refiero a los voluntariamente marginados de nuestras sociedades a quienes llamamos hippies, verdes, ecologistas, locos, ermitaños, etc.

Me refiero a aquellos a quienes hemos tratado y seguimos tratando de incivilizados, ignorantes, primitivos y aborígenes. A quienes ignoramos, sin antes haberles robado sus tierras, haberlos esclavizado, marginalizado, matado voluntaria e involuntariamente, y a quienes les hemos destrozado, desenfrenadamente, su hábitat-que-les-da-vida. Los hemos enfermado, diezmado, matado de hambre, contribuyendo a eliminar sus conocimientos, costumbres y culturas.

Un sinnúmero de tribus en todo el mundo, extinguidas o al borde de la extinción, ha vivido durante siglos, o milenios, respetando y adorando la pachamama, viviendo en comunión con ella. Y nosotros, con nuestra sabiduría, nuestra cultura, nuestra política, nuestros países y sus fronteras, nuestra justicia, nuestra economía, nuestra educación, nuestra sociedad, nuestra competitividad, nos hemos apoderado de ellos y les hemos obligado a vivir según nuestra ciencia de vida, o posiblemente, desde un punto de vista futuro si trazamos una progresión lineal, nuestra ciencia de muerte.

Pues de esta manera, lenta y progresivamente, junto con los indígenas hemos estado matando aquello que nos podría ayudar a mantenernos vivos: el culto a la pachamama y unos conocimientos profundos, poco científicos quizás, de la naturaleza y su funcionamiento.

¿No es hora de cambiar?

¿No es hora de que, nosotros, los un cuarto de la humanidad que estamos torturando al mundo, cambiemos de actitud y de hábitos si queremos dejar a nuestros hijos, nietos y bisnietos un mundo con existencia plena?.....con existencia futura? Hay una necesidad urgente de cambiar las prioridades que promueven la riqueza material por sobre el cuidado de la madre tierra y el bienestar y la justicia comunitaria.

¿No es hora de que aprendamos de estos pueblos indígenas el valor de la pachamama? La madre tierra es la fuente de todo lo que nos importa, incluyendo la economía. ¿No es hora de que nuestra ciencia y sabiduría confluyan con la sabiduría y conocimientos indígenas para devolver la esperanza de vida a las generaciones venideras?

¿No es hora de escuchar a esta gente que tanto sabe desde hace tanto tiempo? ¿No es hora de que aprendamos de ellos para que nuestra ciencia, conocimientos y cultura, para que nuestros sistemas políticos, nuestra economía y educación se alineen hacia un verdadero respeto por nuestra madre, que nos ha dado vida?

¿No es hora de que les devolvamos el espacio de co-decidir sobre ‘nuestras vidas’, espacio que les comenzamos a robar desde hace 500 años?

La perspectiva futura es realmente preocupante, pero soy irracionalmente optimista sobre las capacidades de ‘respuestahabilidad’ humanas. Ya no podemos esperar a que nuestros gobiernos cambien el rumbo (¡ni siquiera el salvador Obama!), porque ellos están muy ocupados intentando no perder los votos, la reelección, la ocupación del poder.

Ahora el cambio solo depende de cada uno de nosotros. ¿Pero que podemos hacer? ¿Que podemos cambiar de nuestros hábitos y costumbres? ¿Que podemos abdicar de nuestras confortables vidas? ¿Queremos abdicar? ¿Queremos cambiar?

No tengo las respuestas a estas preguntas ya que creo que cada uno las tenemos adentro nuestro. Pero una cosa si que se me ocurre: empecemos con cosas pequeñas y vayamos viendo, paso a paso, que otras cosillas podemos ir haciendo.

Un abrazo.

Matías

2 comentarios:

Unknown dijo...

bendigo otra vez estas redes sociales!!!
gracias a facebook llego hasta aquí y me voy llena de orgullo por mis hermanos solidarios...
no sabía dónde dejar un comentario, porque todas las entradas me parecieron super interesantes y profundas!!!!!!
agradezco a todas estas personas que hacen algo por el otro, que tienen un corazón inmenso y dejan que se vea!!!!

felicitaciones por estas obras magníficas!!!
cuenten conmigo para lo que necesiten, ojalá pueda colaborar!!!!!!!!

un super abrazo.....

misolalli@yahoo.com.ar

Anónimo dijo...

gracias adrisol
enrique